Panini y el mercado argentino

Bueno, gente, se me ocurrió empezar a escribir esto después de todo el quilombo que se armó ayer cuando Panini dio a conocer su nueva licencia.

¿Que fue exactamente lo que pasó?

Este sábado y domingo, la editorial Panini Argentina, dió a conocer dos nuevas licencias, una cada día.

El sábado fue la primera, y fue el turno de Netsuzou Trap, manga yuri de 6 tomos, ya finalizada en Japón.

Con este anuncio se encendió la primera alarma en los “fans”, pero la gota que derramó el vaso fue la licencia del día siguiente, Tenkuu Shinpan, serie de 21 tomos, con una secuela publicándose actualmente en su país de origen.

¿Cuál fue la queja de la gente?

Básicamente, empezaron a tildar a Panini como una editorial de mierda, y que solo trae licencias malas y que nadie pidió ni pediría en su vida. Pero estas acusaciones no tienen sentido, repasemos un poco la historia de la editorial en Argentina (la parte de mangas).

Para eso tenemos que irnos atrás dos años y algo, a junio del 2017. Panini entraba al mercado argentino y pisaba fuerte, al menos con las licencias que tenía, Assassination Clasroom y One Punch Man. Dos series que son bastante importantes. Aunque es verdad que las ediciones no acompañaban, y la gente se hizo escuchar. Las quejas venían con motivos, por las hojas amarillas, la falta de sobrecubierta y una traducción que no convencía a los lectores. Ante esta situación, la editorial decidió darle la razón a la gente y empezar a mejorar sus tomos y sus traducciones. Pero no solo eso, también empezaron a licenciar cosas que serían imposibles por parte de otras editoriales. También recuperaron Naruto, de la “extinta” Larp, una licencia, también, muy importante en lo que es el shonen. Poco a poco empezaron a publicar géneros más variados y empezar a pisar más fuerte en el mercado, a medida que, gracias a las quejas de los lectores, iban mejorando ediciones, traducciones y comunicación con los mismos. La editorial creció y tiró su primera bomba, Berserk. Licencia tan esquivada por la competencia, argumentando que era imposible traerla al país. A Panini no le importó, y la trajeron. También empezaron a meterse en el género de comedias románticas, con Negima y Love Hina, y siguieron con el shonen con Noragami. Eran buenas licencias, buenos mangas. La gente empezó a tener mucha fe y confiar mucho en esta editorial, tanto que hasta empezaron a aparecer sus primeros fanboys (ratas asquerosas).

Venían excelente, pero su tope (y el inicio del odio de los “fans”) llegó con las últimas dos tandas de anuncios.

En la primera, anunciaron otro manga que era impensado que llegue al país, Claymore. Una muy buena apuesta, un excelente manga. Después, siguieron dos mangas muy pedidos, Bakemonogatari y Wotakoi, siendo el segundo un josei, género que no está muy explotado en el país y otro pedido y un shonen muy importante, Dr. Stone. También se licenció Rosario+Vampire, otra comedia romántica con un toque más de fantasía y terror (Recomendación - Rosario+Vampire). El amor a Panini crecía cada vez más, y ellos, se hacían cada vez más fuertes como competencia.

Pero, obviamente, no todas las licencias van a ser súper ventas y súper pedidos. También traen otras cosas tal vez un poco más chicas para apostar un poco y tantear el mercado. Ese fue el caso de Radiant, un manga creado por un autor francés que goza de muchísima popularidad, incluso en Japón, donde consiguió su propia adaptación al anime (algo nunca visto), asi que no es cualquier cosa… y Grandblue Fantasy, que la verdad no tengo ni la menor idea de esta…

Acá empezaron las primeras puteadas. Que como van a traer semejante “mierda” y no series que se pedían mucho, como Pokémon (ejem… no voy a opinar sobre esto) o Yu Gi Oh…

Pero, dentro de todo, la gente los seguía respetando, hasta ahora…

Con la última tanda de anuncios, los insultos a Panini inundaron todas las redes, nadie más los quiere, los fanboys se dieron vuelta y ahora no paran de tirarle mierda a la editorial porque, según ellos, siguen sacando mierda y no cosas importantes. Pero ahora también tienen nuevas acusaciones, es una editorial que defraudó a todo el mundo, traen basura cuando en México tienen las mejores licencias (Panini tiene filial en México), no tienen variedad…

Y acá es donde tengo que salir a defenderlos, no porque les chupe las medias o sea un “fanboy”, sino porque todas las acusaciones son falsas o sin sentido.

Como dije al principio, Panini trajo cosas impensadas y muy pedidas, como Berserk, Claymore, Dr. Stone o Bakemonogatari; trajo series de géneros que directamente no existen (o no existían en ese momento) como comedias románticas, con Love Hina, Rosario y Negima o josei, como Wotakoi; trajeron apuestas de mangas bastante populares en todo el mundo, como Radiant; y arrancaron, por fin, con un género directamente inexistente en el país, el yuri, con Netsuzou Trap, que puede abrir la puerta a otras obras de la misma temática.

Es verdad que todavía faltan un montón de géneros, a mi particularmente me interesan mangas seinen o más clásicos, otros, piden isekais… pero creo que esto es un comienzo, Panini tiene variedad y ya demostró que escucha a los lectores.

Por eso digo que decir que no tienen variedad, que traen mangas de mierda, etc, etc… es una completa idiotez, y demuestra que los lectores argentinos (no todos, no voy a generalizar) son muy boludos…

También está el tema de “dejan lo mejor para México y traen basura para acá”, bueno… los que dicen eso son los mismos que decían que no querían un mercado igual al de otro país, y que había que traer cosas distintas, porque no porque haya funcionado bien o mal afuera, funcione bien o mal acá, asi que nada… ya se ve quien es esa gente y que no le da mucho…

Lo dejo acá, solo quería descargarme un poco y hablar de lo que pasó estos días, ya que las acusaciones me parecen muy boludas, y acabo de demostrar por qué. Bueno, nada, ¡hasta el próximo post!